La diabetes es una de las enfermedades metabólicas que causan más lesiones en los tejidos y huesos de las extremidades inferiores, debido a trastornos vasculares y del sistema nervioso. Esto se traduce en una dificultad en el flujo de sangre y / o en una alteración de la inervación, apareciendo rampas y falta de sensibilidad especialmente en las extremidades inferiores.
SIGNOS DE ALERTATeniendo en cuenta que si existe una disminución de la sensibilidad, la función "de aviso" de que algo no funciona bien se ve afectada, podemos mantener una situación de riesgo para el pie más tiempo de lo habitual sin darnos cuenta, y por tanto originar herida. Por ejemplo si hay una piedrecita dentro del calzado, y la sensibilidad disminuida no nos permite notarla, acabará rozando y formando herida. Si a este hecho, añadimos una vascularización precaria, será más difícil cerrar la herida, pudiendo originar infección por el aporte deficitario sanguíneo. Si seguimos sin poner solución, puede empezar a necrosarse, y en el peor de los casos llegar a la conocida gangrena.
Para minimizar riesgos, hay una buena prevención:
Trabajamos con convenio con Catsalut, sólo para el pie diabético, considerado pie de riesgo.